El fin del mundo llegará más pronto de lo que creías… otra vez.
La abuela decía que el mundo sólo se acaba para el que se muere, pero como ya sabes, cada cierto tiempo aparece un grupo de aficionados a la astronomía y a la numerología bíblica que afirma saber cuando será el fin del mundo.
Desde legendarios profetas, teólogos, astrólogos, clarividentes y místicos se hacen mencionar para llamar la atención y crear pánico entre las masas.
En el año 741 antes de Cristo, los romanos temían que roma sería destruida tras 12 años de su fundación. Según el mito, 12 águilas revelaron a Rómulo un número místico que representaba la vida de Roma.
Cuando esta profecía no se cumplió, los romanos creyeron que cada águila representaba una década, por lo que la calma volvió a los habitantes, dándoles una nueva oportunidad a los profetas de la época para que calcularan la nueva fecha del Apocalipsis.
Y así fue, en el año 90, uno de los primeros papas de la iglesia católica también profetizó el fin del mundo, y en el 365, un santo francés llamado Hilario de Poitiers anunció que el final sucedería ese año, ya que Constantino II, quien en ese entonces gobernaba Roma, era el mismísimo anticristo.
En el 500, otros 3 santos predijeron el fin basándose en las dimensiones del arca de Noé.
Y en el 848 una vidente alemana (Thiota, siglo IX), anunció el Apocalipsis y fue juzgada y azotada por herejía.
Y tras haber fracasado con la profecía que dictaba que el mundo acabaría tras mil años del nacimiento de Jesús, los teólogos del primer milenio cristiano, dijeron que el fin llegaría un viernes santo a mil años de su muerte, y como tampoco llegó, pensaron que sería en domingo, en su resurrección.
Doscientos años más tarde, el Papa Inocencio III predijo que el fin llegaría a 666 años del surgimiento de la religión islámica.
Después, en junio de 1523, los más prestigiosos astrólogos de Inglaterra predijeron que el mundo legaría a su fin a partir de una inundación en Londres, creando más pánico del que ya había con lo que más de veinte mil londinenses abandonaron sus hogares buscando terrenos más altos y para el año 1666 la paranoia que acompaña a este número llegó junto a un gran incendio en la capital de Inglaterra.
Tres años más tarde 20,000 cristianos rusos se inmolaron convencidos de que ese año llegaría el fin del mundo.
También aparecieron astrónomos calculando colisiones de cometas con el planeta tierra, y dos veces más se profetizó el retorno de Jesus en el siglo 17.
En 1806, una gallina puso huevos que tenían grabada la frase en inglés ’’Cristo está viniendo’’, pero después se descubrió que el bromista había utilizado tinta corrosiva y reinsertado los huevos en la gallina.
Y el 20 de noviembre de 1822, una monja profetizó el final, un día después de un fuerte terremoto en Chile, y cuando nada sucedió dijo que gracias a las fuertes oraciones de las monjas, Jesucristo había postergado su regreso.
En 1919 se dijo que una alineación de los planetas provocarían la explosión del sol, y años después una ama de casa, declaró haber recibido mensajes escritos de alienígenas que aseguraban el mundo acabaría con una gran inundación en el amanecer del 21 de diciembre de 1954.
El 29 de abril de 1987 el mundo acabaría con el cometa Halley estrellándose con el planeta, y el 9 de julio de 1994 según el pastor John Hinkle, Jesucristo descendería en la ciudad de Los Ángeles.
En 1997 una secta predijo nuevamente el final causando un suicidio masivo de sus feligreses, y en 1999 grupos religiosos predijeron un cataclismo sin precedentes que sucedería un 8 de mayo, y en Colombia, los seguidores de una Secta llamada Iglesia Stella Maris afirmaron que serían recogidos por Ovnis en la Sierra Nevada de Santa María para evitar el fin del mundo.
Cuando llegó el año 2000 se dijo que todos los aparatos electrónicos del mundo dejarían de funcionar, incluyendo las ojivas nucleares que se encontraban armadas haciendo que estallasen y terminaran con toda la vida en el planeta.
Y el 17 de Marzo de ese mismo año, después de equivocarse con su profecía del 31 de diciembre de 1999, Joseph Kibweteere, un profeta católico y vidente de la virgen María prendió fuego vivos a 778 seguidores en Uganda.
Un año después una academia de ciencias afirmó que un ovni aterrizaría en California, y al ser consultados por la falla de su profecía, estos respondieron que ‘’Los Hermanos del espacio no aterrizaron por que el pueblo de la tierra, no estamos dispuestos a aceptar los pueblos avanzados de otro planeta’’
Después fue en Agosto del 2007, mayo del 2011, octubre del 2011, luego el 21 de diciembre del 2012, 13 de marzo del 2013, y según cálculos basados en la mitología vikinga, el fin sería el 22 de febrero del 2014… pero si estabas haciendo planes para fin de año, déjame decirte que el fin del mundo llegará de nuevo y esta vez será en Septiembre, y como presagio del Apocalipsis este 21 de agosto habrá un eclipse solar.
